En cualquier economía, el sector inmobiliario es uno de los mercados más estables, y El Salvador no es la excepción. Si se toman las precauciones necesarias, los bienes raíces le permiten al comprador construir un patrimonio, convirtiéndose en una inversión con altos retornos y muy poco riesgo.
¿A qué se debe que invertir en bienes raíces pueda ser algo muy rentable? Una de las principales razones es la plusvalía que genera. Este término se refiere al aumento del valor de la propiedad durante un período de tiempo y depende de varios factores.
La plusvalía y la minusvalía son aspectos inherentes a cualquier bien inmueble. Se puede concluir que la minusvalía es una disminución en el valor de una propiedad. Pensemos en una casa, pensemos en ella como una estructura fija y que ella y su entorno van cambiando con el paso de los años. Para bien o para mal, estos cambios determinarán si la vivienda gana o pierde plusvalía.
Precisamente de esos factores y sus variaciones estaremos hablando en este artículo. Por lo tanto, cuando estés comprando una propiedad o, por si ya tienes tu propio inmueble, puedas cuidarlo de tal forma que, si quisieras venderlo en un futuro, obtengas un mejor precio del que la compraste, debido a que su valor creció.
Este es el factor principal detrás de cualquier propiedad. De este se derivan otros puntos como:
La proximidad a discotecas, bares o centros deportivos puede ser un factor en contra, debido al ruido o situaciones riesgosas que puedan surgir en estos lugares de ocio, ya que podrían afectar a la calidad de vida de los residentes del área.
La infraestructura es muy importante para cualquier inmueble. La zona debe contar con todos los medios técnicos, servicios e instalaciones básicas para vivir sin problemas. Cuanto mayor sea el número de comodidades, mayor será la plusvalía. Por lo tanto, no pueden faltar servicios como agua potable, alumbrado público, transporte, tratamiento de aguas residuales y electrificación. Si el terreno o la propiedad están ubicados en un área que tiene todos estos y con el paso del tiempo se suman otros más, el valor de la propiedad ira en aumento.
Comprar o construir en un área urbana que está en constante expansión, renovación y desarrollo es una excelente manera de aumentar el valor de su propiedad a lo largo de los años. La calidad de las carreteras y los servicios otorga a las propiedades un mayor valor agregado en el corto y mediano plazo, mientras que los proyectos de mayor envergadura pueden crear plusvalía hasta el largo plazo, pues debemos tomar en cuenta que en el corto y medio plazo, el ruido, el desorden y los factores menos agradables que surgen de las obras de construcción pueden afectar la calidad de vida de los habitantes de las zonas cercanas a ellos.
Especialmente en condominios, la vista es un factor muy atractivo para los inversionistas y agrega mucho valor a la propiedad. Un apartamento con vista al mar o a la montaña no tiene el mismo valor que una propiedad con vista a las ventanas de otro edificio. Por lo tanto, cuando se trata de elegir un apartamento, los que están en pisos más alto suelen ser los más deseados, y quienes construyen complejos de apartamentos a menudo tienen el cuidado de no construir cerca de otros edificios, para no perder este valor.
Al elegir una propiedad en venta en El Salvador, los factores externos no son los únicos que importan. Los atributos propios del inmueble tienen el mismo peso.
Las condiciones internas de la propiedad que pueden causar un cambio positivo de precio incluyen:
La estructura de la propiedad debe ser de alta calidad, con materiales óptimos, bien construida, para que no se deteriore rápidamente con el tiempo y pueda ser un riesgo para usted y su familia.
Además de brindar una buena vista, la apropiada orientación del inmueble puede favorecer el aprovechamiento de factores como el flujo de aire y la luz solar para permitir que la casa tenga buena iluminación natural en la mayoría de sus áreas, o al menos en las áreas clave.
Un punto obvio, pero perfectamente válido, es que cuantos más metros cuadrados tenga la propiedad, mayor será su valor. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la calidad del suelo es más importante que la cantidad de metros cuadrados. Tener un terreo de muchos metros cuadrados de un suelo de buena calidad, ideal para construir o para que lo que ya se construyó sea duradero y menos propenso a deslizamientos de tierra u otros peligros, es un factor seguro para aumentar el valor de un inmueble.
La mala distribución en los espacios de una casa o edificio puede ser la razón por la cual una propiedad se vuelva menos atractiva y, por lo tanto, sujeta a depreciación. No importa cuán grande o pequeña sea una casa, esta debe ser funcional y visualmente agradable, de modo que, aunque sea pequeña, se sienta espaciosa y no incómode a la hora de decorarla y amueblarla.
Finalmente, una de las formas en que nuestra propiedad pueda ganar valor es a través de su mantenimiento y las reformas o mejoras que se le hagan. Una casa que es exactamente igual a como era hace 20 años tiene pocas posibilidades de aumentar su valor. Lo que le otorga plusvalía es que aún se encuentre en buen estado, ya que esto demuestra la calidad de su estructura y equipamiento, y esto se logra de mejor manera al hacerle remodelaciones que la hagan lucir más moderna y en donde se pueda sacar un provecho óptimo de su espacio físico.
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